Demasiado cansados para caminar despues de largas marchas o de los duros combates, quien no aceptaría un taxi, aunque sea improvisado.
Me consta que algo tan simple como llevar a la infantería a modo de pasajeros en el exterior del tanque era una acción que en algunos ejércitos estaba prohibido, por varias razones, era peligroso como es evidente pero también sobrecargaba las suspensiones y el motor, pudiendo provocar una seria avería o un desgaste innecesario en estas máquinas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario